Monday, February 25, 2019

Devocional de la CPTLN del 26 de Febrero de 2019 - Cuando Dios dice que no


ALIMENTO DIARIO

Cuando Dios dice que no

26 de Febrero de 2019

Moisés subió desde los campos de Moab hasta el monte Nebo, hasta la cumbre del Pisga, que está enfrente de Jericó, y allí el Señor le mostró toda la tierra... Allí, en la tierra de Moab, murió Moisés, el siervo del Señor...

Una de las partes más difíciles de la vida cristiana es cuando Dios nos dice "No". "No, no puedes tomar ese trabajo". "No, no tendrás un bebé". "No, no te curaré de la enfermedad que estás sufriendo." Puede ser desgarrador. ¿Quién de nosotros no ha pasado horas de rodillas, rogándole a Dios que cambie de opinión?

Moisés seguramente conoció ese sentimiento. Después de todo, pasó 40 años de su vida guiando al pueblo de Israel a través del desierto a la tierra que Dios les había prometido, asegurándose de que tuvieran agua y comida y un lugar donde acampar, les enseñó los Mandamientos de Dios y resolvió sus disputas, y les dijo lo que Dios había prometido: "una tierra buena y amplia, una tierra que fluye leche y miel" (Éxodo 3:8). Seguramente, más que nadie en Israel, ¡Moisés quería ver la Tierra Prometida!

Pero no la vería. Ese fue el castigo que Dios le había impuesto por su desobediencia en el desierto años antes, cuando le dijo: "ustedes pecaron contra mí delante de los hijos de Israel, y delante de ellos no me santificaron" (Deuteronomio 32:51).

Moisés pudo haber llegado. Después de todo, no estaban lejos del río Jordán. Seguramente podría haber encontrado la manera de vadearlo, infiltrarse en la tierra y escapar sin que Dios lo viera. Pero no. No podía funcionar. Dios lo sabría.

De cualquier forma, dudo que Moisés lo hubiera intentado: amaba a Dios, el mismo Dios que decía "No" a su sueño más querido. ¿Discutir con Dios? Lo haría, y lo hizo. ¿Desobedecer a Dios? No. Moisés lo amaba demasiado.

Y así subió esa montaña y aceptó el premio consuelo: la oportunidad de ver adonde no podía entrar. Y allí, en la misericordia de Dios, Moisés murió. El "no" fue definitivo.

¿O no? Más de mil años después Jesús subió a una montaña diferente en la Tierra Prometida, donde se transfiguró ante sus discípulos. Y con él estaban el profeta Elías y ¡Moisés! Todos esos años después, Moisés finalmente llegó a la Tierra Prometida, por el regalo de Jesús.

Quizás en estos momentos estés enfrentando un "No" de Dios. Si es así, sabes el dolor que causa. Y no hay duda de que estás orando, discutiendo, rogando a Dios que cambie de opinión. Está bien que así sea. Moisés lo hizo. Pero dado que perteneces a Jesús, sabes que el amor de Dios te sigue cubriendo durante el sufrimiento, que sigues siendo su hijo, que Dios puede, y hará, mucho más de lo que podemos soñar a su propio tiempo y manera. Esto no detiene el dolor, pero nos da una razón más para descansar en Jesús, nuestro Salvador.

ORACIÓN: Querido Señor, ayúdame a aceptar tus "No" y a continuar confiando en ti y en tu amor. Amén.

Dra. Kari Vo

© Copyright 2019 Cristo Para Todas Las Naciones. Que a través de estos devocionales, la Palabra de Dios te refresque en tu diario caminar.
Una de las partes más difíciles de la vida cristiana es cuando Dios nos dice "No".

No comments:

Post a Comment