Mi Capitán
Pero fiel es el Señor, que os afirmará y guardará del mal.
Quizá te parezca extraño que todo lo que lo que diga en este libro lo lleve siempre a mi experiencia con Dios. Si te incomoda, perdóname, pero no pudiera dejar nunca más de testificar lo es que es vivir y rendir mi vida por entero a Dios.
En lo personal, he vivido las dos cosas: He estado con el Capitán a bordo y también he vivido sin Capitán. Incluso, me he ido a la deriva. Les confieso que el viaje ha sido largo y fuerte. Cuando estás a la deriva, no sabes para dónde vas, ni los peligros a los que estás expuesto. Estar sin control es arriesgarse a chocar, a perderse o, lo que es peor, a naufragar. Los golpes en mi vida han sido muchos y he regresado lastimada y herida. A decir verdad, no vale la pena.
No hay nada más hermoso que entregar ese barco al Capitán que es Dios y descansar sabiendo que Él tiene todo el control, los recursos y los planes perfectos para nosotros.
Por eso te sugiero que rindas tu vida a Dios. Esto incluye trabajo, hogar y los hijos, a fin de que Él sea el que guíe tu vida y salgas victorioso en todo lo que emprendas.
Un Día a la Vez Copyright © by Claudia Pinzón
Quizá te parezca extraño que todo lo que lo que diga en este libro lo lleve siempre a mi experiencia con Dios. Si te incomoda, perdóname, pero no pudiera dejar nunca más de testificar lo es que es vivir y rendir mi vida por entero a Dios.
No comments:
Post a Comment