Padres, apoyemos a nuestros hijos
Hijo mío, si tu corazón es sabio, también mi corazón se regocijará.
Hombres y mujeres que están hoy listos a leer este devocional, también les convienen que sepan lo que espera Dios de los padres.
Padres, asuman con autoridad el ser como dice Dios la cabeza y el sacerdote del hogar.
Eso significa que debes tener una relación con Dios, de modo que seas la parte más importante de esa casa. Si no asumes tu posición, las mujeres con carácter fuerte tomarán la tuya y estarás en desventaja y fuera del orden de Dios.
Papi, tú eres el proveedor. Tú eres a quien Dios creó para que mantengas tu hogar y seas un excelente administrador del mismo. Claro, si tu esposa está trabajando, las cosas entre los dos serán más fáciles. Sin embargo, ante Dios el que tiene la autoridad tiene la responsabilidad.
NO le des mal ejemplo a tu hijo para que no te avergüence.
NO te entregues cien por cien a tu trabajo o actividades de tu ministerio, a fin de que tengas tiempo para tus hijos.
NO olvides que tu primer llamado es tu familia y Dios te pedirá cuentas al respecto.
NO te apartes de los caminos de Dios, pues allí encontrarás bendición.
Honro hoy a mi esposo porque es un excelente padre de sus hijos y de mis princesas.
Gracias, mi Dios.
Un Día a la Vez Copyright © by Claudia Pinzón
Hombres y mujeres que están hoy listos a leer este devocional, también les convienen que sepan lo que espera Dios de los padres.
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